Adriana Carranca
Cuando era una niña, no tenÃamos dinero para viajar. Nos sentábamos, mi abuelo y yo, en la pequeña escalera que daba acceso al chalet de madera donde él vivÃa con mi abuela, mi tÃo y mi tÃa abuela, otra tÃa y dos primos Allà pasaba las tardes después de la escuela, mientras mis padres trabajaban. Mi abuelo se sentaba en el primer escalón, yo en el tercero. "¿Hacia dónde desea viajar, madame?", preguntaba él. Yo respondÃa un destino cualquiera y hacia allá partÃamos, montados en nuestro autobús imaginario. Mi padre tenÃa otra forma de viajar: los libros. Los fines de semana, recorrÃamos el mundo juntos por las páginas de una enciclopedia que él habÃa coleccionado en fascÃculos y mandado encuadernar con una linda cubierta roja. Cuando crecÃ, quise conocer los lugares que habÃa visitado durante mi infancia con mi padre y mi abuelo; y, como ellos, quise contar historias reales sobre el mundo. Por eso decidà ser periodista. Hoy soy reportera especial del periódico O Estado de São Paulo y escribo para publicaciones internacionales. Mis reportajes ya fueron publicados en revistas como la estadounidense Foreign Policy y la edición francesa de Slate. Cubrà la guerra en Afganistán y Pakistán, donde me encontraba cuando el lÃder de Al-Qaeda, Osama bin Laden, fue abatido en una operación de los Estados Unidos. Me sumergà en el universo de paÃses musulmanes como Irán, Egipto e Indonesia y en los territorios palestinos para reportajes especiales. Vi de cerca los conflictos en la República Democrática del Congo, Sudán del Sur y Uganda. Escribo principalmente sobre conflictos, tolerancia religiosa y derechos humanos, con una mirada especial sobre la condición de las mujeres, porque considero esos temas importantes. Aprendà mucho sobre ellos en la maestrÃa en PolÃticas Sociales y Desarrollo que hice en la London School of Economics (LSE), después de estudiar periodismo. Luego, fui corresponsal en la ONU, en Nueva York, e investigadora invitada del Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo, en la Universidad de Oxford; e integré el Proyecto de Reportaje Internacional, de la Universidad Johns Hopkins, de Washington. Escribà dos libros-reportaje para adultos: Irán bajo el chador (editorial Globo), finalista del premio Jabuti, y Afganistán después del Talibán (editorial Civilização Brasileira). Por mis trabajos, recibà premios como una mención honorÃfica en el Premio Esso y dos ediciones del Premio LÃbero Badaró. Para mÃ, lo más importante es el conocimiento. Gracias a mi profesión, exploré los valles del Tigris y del Ãufrates, del Nilo, del Jordán y el Swat; la meseta iranÃ, cuna del antiguo Imperio persa; los dominios de los antiguos imperios romano y británico; las tierras atravesadas en el pasado por conquistadores como Gengis Kan y Alejandro Magno, entre muchos y muchos otros lugares que antes solo conocÃa por los libros de historia. Pero siempre que tengo alguna duda, vuelvo a la vieja enciclopedia roja.